¿Por qué dedicar tiempo a aquel que no se lo merece?
¿Por qué dedicar tan solo un hueco dentro de mi mente?
¿Por qué es tan complicado, entenderte, entenderme?
No sé, no sé, no sé… pero…
¿Quisiera realmente saber?
No hay razón ni explicación
A ésta absurda confusión,
Ésta inútil conclusión,
Que me hace recordarte,
Con deseos de eliminarte
Para siempre, para siempre
Para siempre yo quisiera
Eliminarte de mi mente,
Borrar… los mil recuerdos,
Que dejaste por mi cuerpo,
Con miradas y con roces
Que reviven con el tiempo
No entiendo
Por qué me cuestiono
Si aun podría decir un te quiero
A ese miserable ser
Que olvidar yo no podré…
Desgraciadamente….
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Con mi mente sumida en los problemas
me distraje, en instantes incontables,
mirando sin saberlo, dentro del alma de una dama
soñadora, tierna, quizas atrapada por el peso de su amor.
A tu pregunta: «¿El amor existe?»,
regreso en mi memoria a Platon,
cuando quizas , sentado en una escalinata,
pronunció la ya celebre frase de la logica:
«Pienso luego existo», y el amor no piensa,
la logica niega entonces su existencia.
Regreso a la pantalla para sumirme en tus palabras,
y contarte que vi un cielo sin estrellas,
es de día y el sol ocupa su lugar,
la razón me domina y tus letras, hechas palabras,
como grito de tu mente, que interpreta los que tu alma dicta,
calla a mi razón y dejo que mi mente te imagine.
Gattaca y efecto mariposa son mis recomendadas,
en contraprestación al antojo que causaste con tu
sugerida : » Una mente maravillosa».
Si siete incognitas tenías, y una sola ecuación las contenía,
solo te faltaron seis ecuaciones más para que el sistema tuviera solución.
Y por ahora me despido, dando gracias por haber leido
de final a principio el contenido, no si antes anotar,
sobre la clave de sol que tu abdomen adorna en una esquina, en los dias haciendolo canción.
Abrazos.
Vaya Juan, admiro tus palabras, tu dedicacion, frases adornadas con una mezcla de comprension y una pizca de admiracion.
Es un placer, un honor, poder leer cosas asi, sin dudar, me has dejado anonadada!
Me encantaria poder contactar contigo para darte las gracias a tiempo real, pues no sé quien puedes ser!
Muchisimas gracias Juan!
Un abrazo!
Con tan amable anotación, honra ud. a un caballero, que por cosas del destino, al alma de tan hermosa dama, pudo darse una asomada.
Cortesía es presentarme y anoto mi correo, medio cibernetico, que acorta las distancias: » correojuanca@gmail.com «, abro con confianza la puerta de esta casa.
Abrazos, Juan