“Sonreir”
Es lo que queda tras una tempestad.
Tras la perdida.
Es lo que regalamos tras un buen regalo,
Tras una buena conversación.
“Sonrisas”
Son por lo que vivimos,
Es nuestro cometido.
Son contagiosas,
Es el mejor virus.
Dicen que tras la tempestad llega la calma, y yo he vivido un huracán lleno de felicidad y tristezas, de sonrisas y lagrimas.
Toda ecuación tiene su resultado, y entre todas las opciones, siempre hay una carta ganadora, es algo así como el comodín…
Son las sonrisas, es nuestra propia sonrisa, nuestra mejor arma frente a cualquier guerra.
Es dar una vuelta imaginaria sobre ti mismo, mientras que percibes todos los detalles que has sido capaz de conseguir en tu vida, retos, proyectos, ya sean empezados, terminados o a medio hacer… están ahí, son tuyos.
Sonrier, inspirar, soltar un breve sonido de seguridad mientras te dices “lo conseguiste” siendo consciente de que el tiempo es tu mejor aliado, para volver a repetir eso una vez mas, y volver a sonreír, con mas proyectos, mas deseos, mas sueños cumplidos…
Ya casi se acaba el año, y muchas cosas han comenzado y otras han terminado, así como ambas…
Siempre habrá una prioridad: Tener un motivo para sonreír. y son las sonrisas, es la vida, mi vida, a la que dedico mi tiempo cada día.
Y lo merezco… sonreir, y hacer sonreír. Ser felíz.
Y hoy, tras la tempestad, en una calma aun no completa (pues la calma absoluta creo que no existe)
Decido sonreír, Soy feliz, me siento feliz.
Por ser yo, por decidir, por ser parte de mi, de mis decisiones, de mis conversaciones, de mis negociaciones.
Y por ser consciente de que sea lo que sea, siempre habrá un mañana que disfrutar y no dejar pasar.
Y con un solo proposito:
“Querer ser feliz” y por ello “Sonreír”
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