Redundancia en el titulo del post, pero es así como me siento.

Siento miedo de sentir acariciar la asintota que se acerca a la perfección, sabiendo que en ésta vida solo se puede aspirar a olerla de cerca y jamás a tocarla, haciendo de la perfección, un amor platónico, algo a la que aspirar y que no podremos alcanzar jamás.
Pero es mejor así, sino ¿donde estaría la gracia de vivir?

Dos te quieros en una semana, comentarios positivos, regalos, el karma que parece que me lo esté recompensando.
La lucha por ser yo, el tri-aniversario que se acerca cada vez mas…
Sonrisas, el alma que se ilumina.
Que me iluminan,
Que se iluminan.

Qué grande se hace el mundo, y que bonito brilla el circulo, cuando sientes la recompensa de lo que te rodea, sintiendo que no has hecho nada, que no te has esforzado, que solo has querido ser tu con el deber de lo que hay que hacer.

Hace algunos años, una amiga me dijo “nadie quiere a un amigo con problemas, y menos hacer de el un nuevo amigo, ni siquiera se acercará a alguien con quien quieres estar, ya que, cuando estás con otra persona, es para desconectar, ser feliz” (fue aproximadamente algo así)
Y esa conversación me marcó y me sigue marcando muchos de mis pasos, a veces la olvido, pero por suerte, tengo a personas que me hacen volver a ella cuando parece que vuelvo a caer, a ellas les tengo que dar las gracias por confiar en mi, y querer hacer de mi, esa linea que va en dirección vertical, creciendo, consiguiendo metas.

Y es el optimismo y las ganas de ganar, y ganar participando, y con la certeza de que siempre hay algo bueno que descubrir, algo nuevo, incluso en todo lo negativo, siempre aprendemos algo, y eso es lo que nos alimenta el alma, además de muchos otros detalles.

Pero hoy siento casi miedo de sentirme que sonrío contagiándome a mi misma, me encanta!
Espero que ésto dure mucho tiempo, ojalá sea infinito…

Por ello, gracias a esas personas que confían en mi, gracias!
Por meterme caña justo cuando lo necesito para volver a apreciar el olor del arte, el olor del amor, de la confianza, de valor del día a día, de las metas conseguidas!
Sin ese día, quizás nada del hoy estuviera ocurriendo, y podría estar siendo distinto y gris.

A veces hay que entender y comprender las cosas, a veces no se ven, y necesitas de esas gafas, de ese limpiacristales que te hace ver lo que no se veía, descubriendo nuevamente, la luz del túnel.

Por eso y más, la sonrisa de hoy te la dedico a ti!!
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