Late, late…
Late a cien por hora, y hasta mi alma se sonroja cuando pienso en ti y ahora…
Late, Late,
Mi corazón late y debate, por verte yo cuento las horas…
Late, Late,
Y mi cuerpo se deshace, y no sé como lo haces, pero es como si matases…

Late y Late,
Laten los latidos, mi platónico individuo, cuando sé que no estaré contigo,

Como un gran enemigo es la posibilidad de estar contigo,
Laten y lloran mis latidos, por lo imposible de tus latidos,
Sufren ahora mis sentidos, por el amor que me has producido,
Maldita la hora en que me enrede a idealizarte y verte, como hoy no es…

Y ahora no siento la vida sin la huida,
De un cambio malo, despacio…
De la tentación del deseo, me temo…
Pero es tan imposible, como sería irse,
A un paraíso fugaz donde poderte besar,
Y cumplir lo que sueño, por un breve momento…
¡Detengamos el tiempo!
¡Y cumplamos mi sueño!

Alejémonos en el mar,
Donde nadie nos pueda mirar,
Pequemos ante las olas,
Y que solo el aire nos deje a solas,
Acaríciame ahora… y no miremos la hora…
Infinitemos el tiempo, para que sea eterno,
Regálame solo este recuerdo,
Envuélvelo con tu cuerpo…

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Isabel Montse