Sueño, luego existo. Sueño, pues, no es realidad.
Sueños que protagonizas, sueño con tu mirar.
Me pierdo en un laberinto, de dudas e incertidumbres, ya no sé diferenciar, la verdad de lo irreal, la cordialidad o de algo mas.
Me confundo, me confundes, tus palabras que me cubren, cobren todo mi ser, con lago que nunca nombraré, no en éste momento, que luego me arrepiento, es algo en lo que no creo, es algo por lo cual me desespero, es algo que deseo, pero a la que a la vez temo.
Hay creada una línea, que me enloquece, y que me detiene. Me tienta, y me revienta, la idea de pensar, que hay algo en mis sueños de realidad, pero aun sin querer pensarlo mas, me confundo mucho mas.
Mis palabras ya no riman, han cruzado una línea, antes de llegar a la cima ¿Por qué me pasa esto ya? Si no me quiero enamorar….
Si, ya lo he dicho, ya….
No me quiero enamorar, me niego, me reniego, mis versos me confunden, me insisten, me resumen y me obstruyen, dando pie a protagonizar, ésta absurda incertidumbre.
No sé que es lo que hacer, si alegrarme o compadecer, deseo volver a la oscuridad, y allí agacharme, esconderme y llorar, aceptarlo de una vez, ya, que no me voy a enamorar, que eso solo es una crueldad, que no va a ningún lugar, que a nada va a llegar.
Los sentimientos son palabras, son palabras que contagian, me remueven la nostalgia, crean magia esas palabras, una absurda encrucijada, que me deja anonadada, sin querer creer en nada, por la incertidumbre, por la falta de costumbre, por el jodido recuerdo que me obstruye, y que me mata si me descubre.
Hoy escribo con malas palabras, con una rima mal sonada, sin querer creer en nada….
Sin saber que hacer ni que decir, que hacer con mi actitud hacia a ti…..
¿Me ayudas?
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