Cuando se cruzan las ideas, desconcertadas por el corazón, influenciadas por imprevistos del destino, te invade una sensación indeseada, que crees incapaz de dominar. El alma se encoje, el corazón se desconcierta, y en el estomago se forma un remolino que te incluso parece cambiarte el carácter, por sentirte dentro de un sinfín de preguntas sin repuestas, y respuestas sin preguntas.
Cuando te sientes dentro del infinito, y no sabes por donde caminar, entre tantos caminos a elegir, donde en cada uno de ellos, sientes algo que no quieres perder, ni abandonar, pero te toca optar, y abandonar sueños, deseos, y adquisiciones obtenidas hasta el momento… el alma se resiente, y te crea una sensación incomoda, extraña, rara, ilícita.
Cuando se cruzan las ideas, y toca seguir, acariciaré el tiempo, cerrando los ojos, dejándome llevar por el viento, hasta poder encontrar, la respuesta, de aquella pregunta, que nunca pude pronunciar. Cuyo enunciado, nunca logré hallar.
PD: Gracias por los abrazos regalados, para calmar el recelo creado por el tiempo. What will I do without you?
Categories: Uncategorized
Deja una respuesta