Ni ganas de escribir, ni de leer, ni de pensar.
Solo un “me da igual”
Sin que el sentimiento deje de palpitar.

Parece que sea tan dificil, algo que es tan simple.
Pero los detalles no son parte del contenido de la educación,
Tampoco el amor, tampoco de la amistad, ni de la reprocidad.

A veces tus palabras me dejan sin ganas,
Me dejan ahogada, a la vez que anonadada.

Tanto tus palabras, como la ausencia de ellas,
Son los hechos, es la escasez de sentimientos.

Si, es la experiencia, es la vida la que nos hace como somos.
Sin ser culpa de nadie, sin ser sentido de nada,
Simplemente, es, y punto.

Pero me deja sin ganas de nada.

Crea una curva decreciente en mis ganas de verte.
De sonreirte y querer besarte y abrazarte,
A simplemente con un leve hola saludarte.

Los sentimientos, la eterna lección que jamás se aprenderá.

Pero yo sé como soy,
Y no me gusta tu descripción, esa no soy yo, solo una visión de tus actos.
Insensatos, neutros, insensibles, negros, blancos.

Y casi que me da igual,
Sigo indecisa, sin saber que hacer,
Con la sensación de que cualquier plan me puede venir bien,
Pero de cualquier plan, ahora, no tengo ganas.

Quizás sea una lección,
Para a ti no estar aferrada…
Para no tener que depender de tu mirada,
De tus besos y tus caricias…
Simplemente de ti.

Un lección para el corazón,
Para hacerlo menos debil.

Por dejarme sin ganas de sentir,
Sin ganas de escribir.

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Isabel Montse