Hoy me propongo a jugar, iniciar una partida a un juego cuyas reglas desconozco. Es más, creo que este juego que os cuento, no tiene reglas predeterminadas, es un juego muy difícil de explicar, definir, expresar…
Hoy me dispongo a empezar a jugar, porque hoy, no se a donde ir, no se por donde caminar, no se por donde empezar, y quisiera, deseo crear éste confuso e irreal juego inexistente para poder levantarme y tomar un camino independiente y a la vez tan diferente que el hoy estoy empleando.

Proyectos que terminan y otros tantos que se inician, que no se cual elegir, y me vuelvo loca así. La invasión de las ideas que me atormentan y me rodean, como un huracán, en cuyo centro me encuentro, sin poder moverme y sin poder volar, sin poder elegir ningún camino, encontrándome así a la deriva, de pensamientos que me derivan hacia el destino incierto que mi cuerpo encamina.

Quisiera crear o encontrar un papel que me dijese algo decente, algo coherente. Algo tan fácil y a su vez diferente, a lo que hasta hoy he coincido, he concebido, y en el mundo en que crecido.
Quisiera por tantos encontrar respuestas, a las preguntas que me realizo y a cuyo destino incierto me encamino…
Tan incierto, tan turbio, tan circunscrito, del que parece ser que no hay salida, y que la única forma de hallar la salida, es rompiendo los esquemas y quemar la enciclopedia, que resume mi vida con datos absurdos, que no pueden dar una conclusión.

Os presento así pues, un puzzle cuya imagen es un laberinto. Un puzzle de piezas que no encajan, aparentemente distantes, diferentes, cuyo dibujo final, no existe, no tiene superficie, irreal e inaccesible, como el infinito dibujado en un papel.

Creo una circunferencia en mi mente, en ella creo infinitas salidas que se prolongan hacia algún lugar que desconozco.
Me encuentro en el circuncentro de la circunferencia ¿en que punto he de salir? ¿Debo deformar el dibujo creando una forma redonda? ¿y si de la circunferencia creo un un esfera y en ella creo infinitas por infinitas líneas que se prolongan desde los radios del centro donde me encuentro hacia un camino que creo incierto?
¿Hacia donde me encamino? ¿Cómo descubrir cual es mi destino?
¿Cuál es el rayo de sol que debo elegir yo?
No lo se..
Pero he de elegir, es mi momento, y no se decidir, hipótesis, conjeturas, nexos, lamentos..
Indecisión, incomprensión ¿Qué lugar encontrare fuera del centro del cual me encuentro?
Seguiré pensando, indagando dentro de este circulo en donde me encuentro para hallar alguna salida, cuando me sienta decidida, lo conseguiré….
Así pues, ya os contaré.

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Isabel Montse